Por: CHARLIE SERRA
Quizás sean tres los tipos de aliens que han recreado los videojuegos de Ciencia Ficción. El primero, que nos recuerda a Oesterheld y a Space Invaders (1978), caracteriza al alien como ejecutante de una invasión ofensiva contra la raza humana. Éste es un tipo de alien que genera conflictos con rasgos militares, ya que, generalmente, se trata de hordas que presentan un enemigo colectivo.
El segundo tipo requiere de héroes humanos solitarios, y nos recuerda juegos estilo survival, como Space Gun (1991) o Dead Space (2008). A la manera de Alien, el octavo pasajero, el enfrentamiento cara a cara con el otro, además de un peligro, recrea un conflicto dual y filosófico. Como en Frankestein, el odiado monstruo termina pareciéndose demasiado a nosotros mismos.
El tercer tipo de alien, más políticamente liberal, aparece inserto en una sociedad gigantesca y plural donde el concepto de ajeno se ha borroneado, ya que una hegemonía representativa ha creado formas funcionales para incluirlo. La fantasía de los mundos de Star Wars, por ejemplo, nos sirve como muestra de esto.
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